En un estudio sobre los hábitos dietéticos de un colectivo de 124 deportistas, jugadores de fútbol y baloncesto, se señalan los síntomas siguientes como los más frecuentes de una inadecuada hidratación: cansancio, sed intensa, calambres, fatiga, piel seca, orina escasa, taquicardia, vómitos, debilidad y globos oculares hundidos. De una manera general una deshidratación hipertónica (la pérdida de agua es mayor que la de electrolitos), presenta algunas señales características que son: dolor de cabeza, fatiga, reducción del apetito, intolerancia al calor, boca y ojos secos, ardor estomacal, y orina oscura con fuerte olor.